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Entre el 2004 y mediados del 2008, - explosión de las burbujas - el hambre atacaba a cerca de 852 millones de personas. La crisis global, económica financiera, y también la crisis alimentaria, en un año a setiembre del 2009 generó un aumento incontrolable hasta más de 1,020' 000 millones con hambre crónico en el mundo.
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Mientras los mal llamados países ricos buscamos soluciones a la obesidad, en los también mal llamados países del tercer mundo, la gente muere por no tener qué comer. Esto aparte de una pandemia de verdad, es un genocidio consentido y tolerado por todos nosotros, en mayor o menor medida y el coste económico de esta inmoralidad sí que es digno de análisis.
*- Jacques Diouf. Director General de la FAO. Lo que quiero decir es que la pandemia más mortífera que realmente asola nuestro planeta es el Hambre en el Mundo.
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FAO.- LA LUCHA CONTRA EL HAMBRE CRONICO EN EL MUNDO
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Para La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), hay mil 20 millones de personas que pasan hambre crónico en el mundo.
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Los precios elevados de los alimentos y la inseguridad alimentaria, - la crisis alimentaria mundial y los monopolios transnacionalizados en la limentación - constituyen serias amenazas y oportunidades a la lucha contra el hambre crónico en el mundo..
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Roma/Johannesburgo/NuevaYork/Santiago/Estocolmo/Tokyo.
FAO.- Diciembre 8 del 2004.
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El hambre cuesta millones de vidas y miles de millones de dólares, según el informe de la FAO sobre el hambre El hambre crónica abruma a 852 millones de personas en todo el mundo.
Según el informe anual de la FAO sobre el hambre: El estado de la inseguridad alimentaria en el mundo (SOFI 2004), el hambre y la malnutrición producen un enorme sufrimiento a las personas, por su causa mueren más de cinco millones de niños al año, y tiene un costo para los países en desarrollo de miles de millones de dólares por la pérdida de productividad y de ingresos nacionales.
"Cada año, más de 20 millones de lactantes nacen con insuficiencia de peso en el mundo en desarrollo", informa la FAO. Estos bebés corren más peligro de morir en la infancia, y aquellos que sobreviven a menudo padecen discapacidades físicas y mentales durante toda su vida. La FAO señala que es lamentable lo poco que se hace para combatir el hambre, si bien los recursos necesarios para evitar con eficacia esta tragedia humana y económica son minúsculos en comparación con los beneficios de invertirlos en esta causa.
El informe añade que si no hubiera que pagar los costos directos de los daños producidos por el hambre, habría más recursos para luchar contra otros problemas sociales. "Una primera estimación sugiere que estos costos directos suman un total de aproximadamente 30 000 millones de dólares al año, más del quíntuplo de la cantidad comprometida hasta la fecha para financiar el Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria."
Además, también están los costos indirectos de la productividad y los ingresos perdidos. Por ejemplo, el informe indica que tolerar los niveles actuales de malnutrición infantil se traducirá en pérdidas de productividad e ingresos durante la vida de estas personas que ascienden a entre 500 mil millones y un billón de dólares al valor de hoy. Es una ironía, añade el informe, que los recursos necesarios para afrontar el problema del hambre sean pocos en comparación con los beneficios que produciría invertirlos en este causa. Cada dólar invertido en la lucha contra el hambre puede multiplicarse por cinco y hasta por más de 20 veces en beneficios.
Tomando en cuenta que el número de personas que pasan hambre en el mundo aumentó a 852 millones entre los años 2000 y 2002, es decir, un incremento de 18 millones de personas desde mediados de los años 90, los costos humanos y económicos del hambre no dejarán de aumentar si no se revierte esta tendencia. La cifra total de personas que sufren hambre se compone de 815 millones de personas en los países en desarrollo, 28 millones en los países en transición y 9 millones en los países industrializados.
FAO. Junio del 2009. Presupuesto Anual contra el Hambre.
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Con este Presupuesto bi-anual, menos de lo que gasta en una semana el Ejército Norteamericano en su guerra de invasión a Irak. Asi podemos combatir el hambre crónico en el mundo, muy por el contrario aumentamos, porque más alto es el Presupuesto Anual que gasta la "Burguesía" modernizada en el sostenimiento de sus "Clinicas" y "Cementerios" para sus Mascotas. !! Que hermosa democracia y que felicidad la del mundo "post-moderno" ¡¡
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La Organización de Alimentación y Agricultura de las Naciones Unidas (FAO) contará con un presupuesto de 867,6 millones de dólares para desempeñar sus programas durante el período 2008-2009, según aprobó la 34 Conferencia de esta organización celebrada en Roma entre los pasados 17 y 24 de noviembre.Se trata de un aumento del 13,3 por ciento, con respecto al anterior bienio 2006-07, en el que fue aprobado un presupuesto de 765,7 millones de dólares, según declaró el Director General de esta organización, Jacques Diouf, durante una rueda de prensa.
Las consecuencias directas en la economía real, la economía de sobrevivencia de las personas comunes y corrientes ha generado profundos abismos sociales y humanos la crisis económica financiera, la cual ha influido directamente en la suba excesiva del precio de los alimentos a nivel global. Los gobiernos y los propios Estados, desgraciadamente no han podido - unos- otros - no han querido por no tener capacidad - una transnacional muchas veces lo duplica en presupuesto anual, como es el caso de los países subsharianos, algunos países centro-americanos, o del propio América Latina, poner un alto a la suba y monopolización de los alimentos a nivel planetario. Los monopolios hoy transnacionalizados, muy a pesar de la crisis económica financiera especulativa mundial, no han parado en sus ganancias gigantescas, simplemente controlando a nivel mundial los alimentos, los precios - especulación - y el mercado. Y mucho más, hoy apoderándose, o alquilando millones de hectáreas de tierras de cultivo en los países en desarrollo – Tercer Mundo -, precisamente para manejar y controlar gangsterilmente la producción de alimentos ante el crecimiento de consumidores los próximos años, la reducción de la producción - por la recesión - la baja de los salarios y la enorme desocupación absoluta existente en el mundo.
Los recursos aplicados por las familias a la alimentación en la Unión Europea son de un 20 % de su renta aproximadamente, mientras que en los países más pobres alcanza el 65 %. Por eso cualquier pequeña alteración en los precios de productos tan básicos como el trigo, arroz o maíz, tienen un impacto tan fuerte sobre sus economías domésticas. El fuerte crecimiento de la demanda de países emergentes como la India o China, que aspiran lógicamente a comer más y mejor y las nuevas tecnologías de bioenergía (bioetanol, biodiesel, etc), por más que los ecologistas lo nieguen, han tirado de los precios al alza en estos años. Pero hay un componente del precio que todos conocemos y que está siempre presente y es la especulación.
El incremento del precio en los alimentos que se suscitó a partir del surgimiento de la crisis económica internacional, es uno de los factores a los que se le atribuye el récord en el aumento del número de personas que sufren hambre en el mundo. La actual situación financiera y el precio de la comida fue calificada como una "peligrosa mezcla" por el director de la FAO, Jacques Diouf.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), denunció este viernes que una de cada seis personas en el mundo pasa hambre, lo que equivale a mil 20 millones de ciudadanos, cantidad que aumentó en los últimos meses en comparación con cifras anteriores, por la crisis económica mundial, según destaca el organismo.
El director de la FAO, Jacques Diouf, y la directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Josette Sheeran, asistieron este viernes a una conferencia de prensa, en la que presentaron los resultados de la crisis económica global y los altos precios de los alimentos sobre el problema del hambre en el mundo.
Según los datos publicados ante los medios de comunicación, además de registrarse un aumento de las personas con hambre en el mundo, desde hace tres años se ha elevado el porcentaje de la población mundial que se encuentra en esa circunstancia.
Diouf afirmó que por la "peligrosa mezcla de crisis económica y altos precios de los alimentos" el año pasado 100 millones de personas entraron en la categoría de hambrientos. Este hecho supuso "un incremento del 11 por ciento".
Señaló que al problema se suma los bajos ingresos y el creciente desempleo, que reducen las posibilidades de las personas de bajos recursos de adquirir alimentos,
El funcionario definió la situación como una silenciosa crisis que amenaza la paz mundial y la seguridad.
"No podemos ser indiferentes ante la presente situación de la inseguridad alimentaria en el mundo", insistió Diouf.
Diouf se mostró esperanzado en la próxima conferencia mundial sobre alimentos que se desarrollará en noviembre de este año, para abordar el tema y acatar las soluciones al respecto.
Propuso que se trabaje en "un nuevo orden alimentario mundial".Tanto Diouf, como la directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Josette Sheeran y el representante del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), Matthw Wyatt, se mostraron de acuerdo en que la crisis alimentaria no se debe "a una falta de conocimientos".
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), denunció este viernes que una de cada seis personas en el mundo pasa hambre, lo que equivale a mil 20 millones de ciudadanos, cantidad que aumentó en los últimos meses en comparación con cifras anteriores, por la crisis económica mundial, según destaca el organismo.
El director de la FAO, Jacques Diouf, y la directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Josette Sheeran, asistieron este viernes a una conferencia de prensa, en la que presentaron los resultados de la crisis económica global y los altos precios de los alimentos sobre el problema del hambre en el mundo.
Según los datos publicados ante los medios de comunicación, además de registrarse un aumento de las personas con hambre en el mundo, desde hace tres años se ha elevado el porcentaje de la población mundial que se encuentra en esa circunstancia.
Diouf afirmó que por la "peligrosa mezcla de crisis económica y altos precios de los alimentos" el año pasado 100 millones de personas entraron en la categoría de hambrientos. Este hecho supuso "un incremento del 11 por ciento".
Señaló que al problema se suma los bajos ingresos y el creciente desempleo, que reducen las posibilidades de las personas de bajos recursos de adquirir alimentos,
El funcionario definió la situación como una silenciosa crisis que amenaza la paz mundial y la seguridad.
"No podemos ser indiferentes ante la presente situación de la inseguridad alimentaria en el mundo", insistió Diouf.
Diouf se mostró esperanzado en la próxima conferencia mundial sobre alimentos que se desarrollará en noviembre de este año, para abordar el tema y acatar las soluciones al respecto.
Propuso que se trabaje en "un nuevo orden alimentario mundial".Tanto Diouf, como la directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Josette Sheeran y el representante del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), Matthw Wyatt, se mostraron de acuerdo en que la crisis alimentaria no se debe "a una falta de conocimientos".
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