viernes, 18 de enero de 2019

LOS HISTORIADORES Y LOS PELIGROS PARA LA DEMOCRACIA.

&&&&&

TODOROV: "EL NEOLIBERALISMO ES UNO DE LOS PELIGROS PARA LA DEMOCRACIA". TZVETAN TODOROV, uno de los grandes intelectuales de referencia mundial, considera que en Europa los valores de la vida pública "están cada vez más debilitados" y que el neoliberalismo es uno de los peligros que acechan a la democracia.

"El neoliberalismo es un peligro muy próximo porque, de momento, es la ideología de nuestros gobernantes, hay otras ideologías que se perciben que son peligrosas, pero el neoliberalismo sustituye a la democracia, con lo cual nos encontramos en un régimen que ya no corresponde a la definición de democracia", dice el historiador, filósofo o lingüística de origen búlgaro.

Todorov, que está estos días en España, ha realizado estas declaraciones a un reducido grupo de periodistas, con motivo de la lección magistral que impartió con el título "Los valores europeos", dentro del ciclo "La España posible", organizado por Bertelsmann en Madrid.

Además, el autor de "La experiencia totalitaria" o "Los aventureros de lo absoluto", visitó también el Museo del Prado, una de sus grandes pasiones y recorrió la exposición temporal dedicada a los cartones de Goya, el pintor por el que la dedicado varios libros y el último "La pintura de la Ilustración, de Watteau a Goya". Y es que Todorov, Premio Príncipe de Asturias en Ciencias Sociales en 2008 y de nacionalidad francesa, donde reside desde hace años, cree que Goya fue un gran pensador tan importante como Kant o Dostoievski y que abrió el camino del arte a la modernidad. Pero en su disertación sobre Europa hoy, el autor "El nuevo desorden mundial", se adentra en la defensa de los valores europeos como base sobre la que construir el orden mundial.

"Pero se trata -añade- de saber de qué manera vamos a gestionar esa pluralidad, si se gestiona desde el espíritu de la moderación. "La vida pública necesita valores y la caída del Muro de Berlín, paradójicamente, ha debilitado más los valores públicos, la doctrina neoliberal triunfante protege el poder de los individuos sin preocuparse del bien común", explica este experto en los totalitarismos europeos.

El filósofo también alerta de la evolución de la tecnología y su uso para el poder, ya que "permite la vigilancia y el control de la población con el pretexto de garantizar su seguridad. Los valores europeos de pluralismo y moderación se ven en situación de peligro y amenazados".
 

 TZVETAN TODOROV, uno de los grandes intelectuales de referencia mundial, considera que en Europa los valores de la vida pública "están cada vez más debilitados" y que el neoliberalismo es uno de los peligros que acechan a la democracia.
***

Todorov, que no quiere hacer ningún comentario concreto sobre la situación de España, hace hincapié en la defensa de uno de los valores fundamentales a su entender: el pluralismo.

"El pluralismo es un rasgo constituyente de la Unidad Europea -aclara-, a diferencia de Estados Unidos o China, no es solo un país con un solo gobierno, sino 28 dentro de la Unión o 40 o más en el Continente, con lo cual la identidad europea está relacionada con esta pluralidad".
"Pero se trata -añade- de saber de qué manera vamos a gestionar esa pluralidad, si se gestiona desde el espíritu de la moderación.

Y considera que para construir estos valores europeos como base sobre la que construir el orden o "desorden mundial", es preciso superar los prejuicios propios de cada país y las fronteras, para evitar los comportamientos nacionalistas.

Para el filósofo, el nacionalismo es otro de los enemigos de los valores europeos. "A mí lo que me interesa es de qué manera podemos tener en cuenta a los demás, aquellos que son diferentes, aquellos que no son parecidos y el nacionalismo solo reconoce aquellos que son semejantes, al idéntico", sostiene.

Todorov da un discurso en clave positiva y siempre destacando lo que nos une en Europa y lo que constituye una garantía de pluralidad y respeto. Convertir Europa en una idea que supere el mero hecho de asumir su propia defensa a la que llama potencia tranquila.

No obstante, concluye: "Al igual que todos yo busco de qué manera podrían defenderse los ciudadanos, pero todos somos ciudadanos europeos responsables de la situación en la que vivimos".

/////



Peligro permanente para el Sistema Democrático Mundial, para el trabajo diario de los "Medios de Comunicación" libres del poder del capitalismo global, peligro diario para la existencia de la Humanidad. Su lema de todos los días es la "nueva guerra", pero ahora nuclear.
***



LOS HISTORIADORES Y LOS PELIGROS PARA LA DEMOCRACIA.
*****

Carlos Sanz Díaz.

Fundación para el conocimiento.

Viernes 18 de enero del 2019.


En el año que termina hemos asistido a numerosos debates en los que la historia se utiliza como herramienta de la argumentación política. Los propios historiadores intervienen a menudo en debates políticos y sociales, defendiendo posiciones muy diferentes, como corresponde a una comunidad plural. Pero más allá de ese pluralismo, ¿cabe una toma de posición común por parte de los historiadores ante una cuestión tan actual como la viabilidad del sistema político democrático y el papel de la historia en su presente y futuro?

Esa es la cuestión que se planteó en el 52º Congreso de Historiadores celebrado en Münster en septiembre de 2018. Allí la asamblea general de la Asociación de Historiadores e Historiadoras Alemanes (Verband der Historiker und Historikerinnen Deutschlands, VHD) aprobó por amplia mayoría una resolución “respecto a los peligros que acechan a la democracia”, con el siguiente texto:

Resolución de la Asociación de Historiadores e Historiadoras alemanes respecto a los peligros que acechan a la democracia.

Aprobado por la Asamblea General el 27 de septiembre de 2018 en Müster (Alemania)

En Alemania, como en muchos otros países, los ataques sin medida contra las instituciones democráticas están amenazando en la actualidad los cimientos del orden político. Como historiadores, consideramos nuestro deber advertir contra esas amenazas. La confrontación de opiniones es un elemento esencial de toda sociedad pluralista, pero deber seguir ciertas reglas para no socavar la democracia misma.


La tarea de la ciencia histórica es contribuir a una mejor percepción de los problemas actuales mediante el análisis de los desarrollos históricos y resolver la complejidad de sus causas. Sin embargo, las políticas actuales se orientan cada vez más por los estados de ánimo que transmiten las encuestas de opinión y por la desbocada dinámica de los medios de comunicación. Como historiadores, nos gustaría enfatizar que solo pensar en periodos más largos de tiempo puede garantizar la viabilidad a largo plazo de nuestro sistema político.

Por lo tanto, consideramos indispensables las siguientes actitudes básicas de convivencia democrática en el ámbito político y social:


Por un lenguaje históricamente sensible, en contra de términos discriminatorios.

La discusión política en democracia requiere un lenguaje sucinto y marcado que resuma la propia posición, pero que no niegue a los demás un respeto fundamental. Los insultos de hoy dirigidos a los políticos como “traidores al pueblo” o a los medios de comunicación como “prensa mentirosa” retoman el lenguaje antidemocrático del periodo de entreguerras. También hay numerosos ejemplos históricos del efecto desastroso que han causado términos despectivos y de exclusión dirigidos a un “otro” a causa de su religión, su origen étnico, su sexo o su orientación sexual.

Por una democracia parlamentaria y una cultura pluralista de debate, contra el populismo.

La toma de decisiones políticas en las democracias pluralistas tiene lugar en debates públicos que expresan la diversidad de opiniones políticas e intereses sociales. Por contra, la idea de que existen personas capaces de detectar y determinar una supuesta voluntad “única” de un pueblo no deja de ser una ficción que sirve principalmente al propósito de convertirse en invulnerable cuando se trata de exponerse al debate público. En la República de Weimar, la idea de “voluntad popular” allanó el camino para un movimiento cuyo “líder” se entendía a sí mismo como personificación del mismo.

Por una Europa unida, contra el unilateralismo nacionalista

En consideración de los muchos conflictos violentos que ha vivido Europa a lo largo de su historia, la unificación europea en nombre de la democracia pluralista y de los derechos humanos inviolables es uno de los logros más importantes del siglo XX. Y aunque la legitimidad de los diferentes intereses nacionales está fuera de toda duda, el unilateralismo nacionalista pone en peligro ese logro histórico. No bastan las estrategias nacionales de resolución de problemas para abordar adecuadamente los desafíos políticos, humanitarios, ambientales y económicos de un presente globalizado. Al mismo tiempo, no se ha de olvidar la violencia colonial que los europeos han ejercido en otras partes del mundo, la cual nos recuerda nuestro deber de cumplir con la responsabilidad común respecto a las consecuencias de nuestra política en países no europeos.

Por la humanidad y la ley, contra la discriminación de los migrantes.

La migración es una constante histórica. A pesar de los problemas asociados, ha enriquecido a las sociedades participantes en su conjunto, también a la alemana. Por lo tanto, es importante trabajar hacia una política activa de migración e integración basada en el pragmatismo que respete tanto los derechos humanos como el derecho internacional. A Alemania le corresponde aplicar, tanto por su potencial económico como por razones históricas, el derecho de asilo político garantizado en la Constitución, del mismo modo que es su obligación brindar asistencia en situaciones de crisis humanitarias.

Por un examen crítico del pasado, en contra de la perversión política de la Historia

La República Federal de Alemania es hoy una democracia estable. A ello ha contribuido también el hecho de que, tras resistencias iniciales considerables, la población alemana contempla hoy en su gran mayoría de manera autocrítica y diferenciada la historia del nacionalsocialismo. De este proceso también participó esta nuestra disciplina de la Historia, si bien con retraso. En todo caso, todo manejo responsable del pasado ha de partir de una ciencia histórica dispuesta a la autocrítica, libre en esencia de cualquier manipulación política. Sus hallazgos y conclusiones nacen de la investigación sobre fuentes y han de resistir el debate crítico. Solo así se hace posible preservar la consciencia de cuáles han sido las condiciones históricas que han hecho posible nuestra democracia y defender a esta frente a “hechos alternativos”.

El texto original de la resolución puede en alemán aquí y en inglés aquí.

Las reacciones a la resolución publicadas en los medios de comunicación pueden seguirse aquí (Sophie Genske, Materialsammlung . Reaktionen in Presse und Rundfunk auf die Resolution des VHD 2018, in: Zeitgeschichte-online, Oktober 2018, URL: https://zeitgeschichte-online.de/editorial/materialsammlung)

Referencia del texto de la resolución: Annette Schuhmann (Hg.), Resolution des Verbandes der Historiker und Historikerinnen Deutschlands zu gegenwärtigen Gefährdungen der Demokratie, in: Zeitgeschichte-online, Oktober 2018, URL:https://zeitgeschichte-online.de/editorial/resolution-des-verbandes-der-historiker-und-historikerinnen-deutschlands-zu-gegenwaertigen

*****

No hay comentarios: