viernes, 28 de octubre de 2011

La Democracia en América Latina. Una Mirada desde la nueva Sociedad Civil, la Ciudadanía Múltiple y los Nuevos Actores Sociales.

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En el escenario local-mundial de las clases y la lucha de clases, es la Sociedad Civil, como escenario de escenarios, es el “nuevo” escenario de la calle, la plaza pública, la movilización y la protesta, conquista de nuevos contextos del espacio público - sociedad ciudadana, como sociedad civil es el espacio público en donde los ciudadanos pueden y deben disponer libremente de sus aptitudes - y nuevas alternativas de una Opinión Pública Democrática, es el campo emergente de la movilización y la lucha diaria, es el surgimiento de los nuevos poderes locales, - es el desenclave local “sociológico” ante el mundo, frente a los poderes fácticos globales, en situación de doble contradicción; primero en un contexto de crisis económico-financiera mundial, - parte de las tres crisis mundiales - pero a su vez impulsan nuevos procesos sistémicos de acumulación del capitalismo en la era imperialista; segundo la crisis política global, la crisis de la Unipolaridad mundial, del Estado corporativo global, crisis que genera en sus entrañas nuevos poderes regionales descentralizados – el Multilateralismo político -.


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Dr. Pablo Raúl Fernández Llerena, ciudadano mariateguista, líder de la generación 68. Es partidario de la Nueva Democracia Participativa, dialogante, solidaria, la Democracia del trabajo y de la Madre naturaleza.

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La Democracia en América Latina.


Una Mirada desde la nueva Sociedad Civil, la Ciudadanía Múltiple y los Nuevos Actores Sociales.


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Pablo Raúl Fernández Llerena.


Sociólogo. Politólogo.


“No estoy de acuerdo con tus ideas, pero defiendo tu sagrado derecho de expresarlas”.


1.- Introducción. La crisis de la democracia liberal.


Un fantasma, recorre hoy no sólo Europa como hace más de 150 años expresara el “viejo” Carlos Marx, hoy millones de jóvenes, universitarios, sindicalistas, desempleados, emigrantes, mujeres – por una nueva democracia - los “ni, ni” – ni trabajan, ni estudian, todos “nuevos ciudadanos de la crisis”, recorren el mundo, exigiendo cambios,- son vigilados pero no representados - transformaciones sociales y políticas - la “revolución de los pueblos en democracia - ante el fracaso, desastre y corrupción de los “viejos” poderes globalizados, salvajes y bárbaros, poderes imperialistas, responsables directos de las crisis multidimensionales actuales. Ciudadanos, de todos los países del mundo, Uníos, para rescatar el mundo que nos pertenece y forjar un mundo superior. ¡! Otro Mundo, Socialista, sí es posible.¡¡.


Una interesante performance, una buena y aceptable alternativa, manifiesta hoy en la coyuntura de la crisis global, la mundialización del Nuevo Movimiento Social de los Indignados – movimientos globales: “Democracia Real, Ya”; “Juventud sin futuro”; “No, nos representan”; “Ocupa Wall Street”, etc, - insurgencia universal que se manifiesta en el escenario del “cambio de época” a nivel mundial, en un contexto marcado por el surgimiento de un nuevo proceso de acumulación mundial del capitalismo, así como en el campo político-social, (in)surge, una nueva sociedad civil, centrada en una realidad múltiple, compleja, cada vez más profunda y extensa, es el “mundo” de las clases y la lucha de clases, terreno sumamente polarizado, turbulento – Cultura, Identidad, Comunicación y Biodiversidad – circuito infernal, en el cual hoy la democracia y la ciudadanía, constituyen parte de este proceso e intentan explicar, el carácter estructural de la crisis, la recesión, y el “posible” default, cada vez más intensa y profunda así como la responsabilidad central que en la coyuntura, asumen los nuevos actores sociales.


Analizar e interpretar desde el campo de La Sociología de las Ausencias la Democracia en América latina como sistema político hegemónico y dominante, en la coyuntura del contexto actual, es de extraordinaria importancia, pero no solamente, dentro de los parámetros tradicionales del las elecciones nacionales, los partidos políticos, las instituciones en general, pero sí reafirmando la validez central que tiene la Libertad de expresión junto a la libertad de empresa, así como otros elementos no importantes en la presente coyuntura que en definitiva trastocan el verdadero contenido político y el carácter de clase que en sí tiene la Democracia como concepto multidimensional, polisémico y concatenado a un conjunto articulado de nuevas relaciones sociológicas en una sociedad marcada por cambios muy importantes no solamente producto de la crisis mundial actual, sino también por los propios elementos centrales endógenos, nacionales, locales, que emergen hoy en un escenario multipolarizado.


Precisamente este es el contexto múltiple, complejo, turbulento, polarizado, local, regional, nacional, continental y mundial, terreno en el cual la democracia Liberal, representativa a ingresado en grave proceso de una crisis multidimensional, que muy a pesar de su actual situación hegemónica, dominante, única en todos los continentes, no ha sabido asumir con responsabilidad desde los poderes fácticos globales o nacionales, la nueva responsabilidad social y política que debería asumir, post Caída del Muro de Berlín; sin embargo, su hegemonía coyuntural en el tiempo histórico del Consenso de Washington, fue considerada por sus mentores globales como el triunfo definitivo, contra su enemigo más poderoso, el Socialismo de la clase obrera del siglo XX.


Pero tenía, otro enemigo, tan poderoso como el propio socialismo, la propia democracia, “triunfante y victoriosa” frente a la nueva estrategia mundial de los 90’, las nuevas instituciones globales que asumirían este reto y responsabilidad como elementos centrales articuladores de los “viejos” actores sociales, y los nuevos protagonistas políticos que el mundo producía como resultado directo de las “nuevas políticas” asimétricas, desiguales, focalizadas, impuestas por el poder “único” de la globalización neoliberal, fuertemente empoderado desde lo local y su visión global por el poder de los medios de comunicación, ahora, fortalezas del modelo financiero especulativo mundial, de la Unipolaridad del Estado corporativo global y “nuevo” poder de articulación entre la crisis final de los viejos actores sociales y políticos – pero que le convenía que supervivan algunos, necesarios para su manipulación – y el (in)surgir de los “nuevos” – solamente, caretas, etiquetas – poderes locales y mundiales que traían consigo las fuerzas económico, sociales y políticas de los monopolios transnacionales en la era de la globalización neoliberal.

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2.- El Nuevo escenario local-mundial: la Sociedad Civil emergente.


En el escenario local-mundial de las clases y la lucha de clases, es la Sociedad Civil, como escenario de escenarios, es el “nuevo” escenario de la calle, la plaza pública, la movilización y la protesta, conquista de nuevos contextos del espacio público - sociedad ciudadana, como sociedad civil es el espacio público en donde los ciudadanos pueden y deben disponer libremente de sus aptitudes - y nuevas alternativas de una Opinión Pública Democrática, es el campo emergente de la movilización y la lucha diaria, es el surgimiento de los nuevos poderes locales, - es el desenclave local “sociológico” ante el mundo, frente a los poderes fácticos globales, en situación de doble contradicción; primero en un contexto de crisis económico-financiera mundial, - parte de las tres crisis mundiales - pero a su vez impulsan nuevos procesos sistémicos de acumulación del capitalismo en la era imperialista; segundo la crisis política global, la crisis de la Unipolaridad mundial, del Estado corporativo global, crisis que genera en sus entrañas nuevos poderes regionales descentralizados – el Multilateralismo político -.


En este escenario de varias crisis, (in)surgen los nuevos poderes locales-regionales, - ahora, rescatamos de la Historia del Socialismo, de la historia de las luchas del proletariado, el concepto de Sociedad Civil, presente en las célebres e históricas jornadas revolucionarias de la clase obrera, - forjada, construida y fortalecida, en tiempos revolucionarios de Los Cien Días - durante la insurgencia proletaria de la Comuna de París, Francia 1871, escenario de históricas decisiones socialistas, pero también de significativos olvidos, donde la clase obrera con su gran capacidad de organización, la fuerza de sus combatientes, su espíritu revolucionario y la defensa de su Patria, era capaz de tomar el cielo por asalto; - es la Nueva Sociedad Civil, plural, popular, democrática, autónoma, “insurgente” contra los poderes tradicionales legitimados por los procesos electorales, los partidos políticos y la activa intervención del “nuevo” poder global de los Medios de Comunicación.


Cuestiona, como principio la “vieja institucionalidad” – “arcaica”, dormida, atrasada, fosilizada, profundamente cuestionada, emparejada en viejos esquemas no activos, no dinámicos y cada vez menos abiertos a los nuevos actores sociales y políticos, empapelada en “viejos” títulos, rótulos encallecidos, representaciones que en definitiva no funcionan en la sociedad actual- rebasada en la coyuntura actual, por los nuevos sectores y grupos sociales emergentes. ( situación que hoy no solo vemos como testigos lo que está ocurriendo en los países desarrollados, democráticos, “vitrinas” de derechos humanos en el mundo – países desarrollados de indignación de millones de ciudadanos que hoy acampan en sus principales ciudades, en lugares históricos y protestan contra los ricos que no pagan impuestos, los “viejos” y “nuevos” explotadores que han liquidado los derechos de los trabajadores, corruptos y podridos políticos que están utilizando el Estado – con el dinero de todos los ciudadanos, para salvar, precisamente a sus bárbaros explotadores - pero, además, cuestionan al sistema político por ineficiente, corrupto y ser parte central, activa de las crisis sistémicas, multidimensionales en tiempos de la crisis “final” de la modernidad. Por ello, en su compromiso con el futuro, asumiendo nuevas formas de liderazgo colectivo, son protagonistas de nuevas formas de hacer política y reclaman más democracia para los pueblos.


El poder local emergente, trae consigo y representa el conjunto articulado, dialéctico, autónomo de multiplicidad de potencialidades individuales, personales, que por siglos han convido al interior de la cultura popular, como reservorio histórico: En el escenario de los nuevos territorios locales regionales básicamente culturales: identidades culturales y sociales, tradiciones, danzas, música, memoria colectiva, historia local, saberes populares, sistemas de trabajo, prácticas comunitarias, innovación social, en referencia a contextos (empleo, trabajo, enseñanza, capacitación, en la tradición y/o herencia comunitaria), infinidad de prácticas de resistencia cultural; manifestaciones en el ámbito de los valores individuales y colectivos, que igualmente fortalecen y conectan mayor dinamismo a la Ciudadanía: talento, capacidad, aptitudes, idoneidad, habilidades, destrezas, especialidad, vocación, ingenio, arte, técnica, suficiencia, vocación, etc.


Así como manifestaciones concretas, cohesionadas y dinámicas del conjunto de sinergias sociales – trabajando en conjuntoo integración de elementos que dan como resultado, que aprovechan y maximizan las cualidades de cada uno de los elementos, constituyen verdaderas alternativas para garantizar nuevas formas de relaciones propuestas, construidas, diseñadas, recreadas, reproducidas, estratégicamente a nivel local-regional-nacional y su perspectiva de desarrollo, visión de futuro y compromisos en el competitivo mundo globalizado.

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3.- La Ciudadanía múltiple, como expresión de un mundo polarizado.


Igualmente definir en ese contexto la Ciudadanía,- sociedad ciudadana como sociedad civil es el espacio público en donde los ciudadanos pueden y deben disponer libremente de sus aptitudes - no solamente nos podemos quedar tranquilos, observando y ser parte de las Tesis Liberales, que “los viejos” conceptos de la herencia liberal de la Historia de los derechos centrales – económicos, civiles, políticos y sociales – hoy han sido capturados y domesticados por los organismos supranacionales – Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, Banco Interamericano de Desarrollo e incluso las propias Naciones Unidas,- han centrado todo el campo de su definición, objetivos y estrategias en el “viejo” ideario” liberal, situación que no les permite avanzar hacia contextos absolutamente diferentes, contradictorios, hasta multipolarizados, donde hoy se presenta la raíz, el desarrollo y reconocimiento de la Nueva Ciudadanía.


La nueva Ciudadanía, presente en los contextos laborales culturales, étnicos, ambientales, comunicacionales, sexuales, institucionales pueblos originarios, comunidades históricas, es decir, los nuevos escenarios múltiples donde hoy se presenta la Ciudadanía de la población de los poderes locales emergentes. Precisamente hoy, este constituye un excelente terreno, ámbito y territorio – como eje multidimensional – para analizar e interpretar, tener una Nueva Mirada sobre la Ciudadanía en relación a la Democracia.


También somos parte y actores principales en nuestros países de América latina, donde el sistema democrático hegemónico, políticamente liberal y representativo, aposentado en los viejos moldes de la democracia burguesa, que al sentirse única y triunfante en la década de los 90’ después de la Caída del Muro de Berlín, su más grande opositor era la propia democracia, ello significa que debió de cambiar, transformarse, modernizarse significativamente, en beneficio del propio sistema político en tiempos del Consenso de Washington. Pero se durmió y confió en su gran poder, que funcionaba dentro de un escenario global de la Unipolaridad – la ideología y la política única, el poder corporativo único y mundial, el poder corporativo norteamericano – pensaron y estuvieron convencidos, que al haber derrotado al Socialismo, ahora tendrían larga vida, pero larga vida de miseria, pobreza, exclusión social, desigualdad social, corrupción, violencia e inseguridad, economía criminal, economía de la guerra, etc..


Por ello en nuestro comentario anterior hemos cuestionado, que solamente analizar la Democracia desde el ámbito de la ciudad y la modernidad y en base a una interpretación de 3 países – por lo más representativos que sean, no es la totalidad de los países de América Latina. Para analizar e interpretar la democracia y el sistema político, hoy existe un conjunto un amplio de elementos centrales de carácter económico, social, político, cultural e institucional.

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4.- La forja y construcción de la “nueva” Democracia. Su fortaleza, los derechos sociales y políticos.


Tener una nueva Mirada de la democracia en países como Venezuela, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Paraguay, Perú, Colombia, es necesario ingresar al escenario de la Nueva Sociedad Civil emergente – es el nuevo poder local – donde la participación de las grupos sociales locales, regionales y nacionales es principal y determinante en el proceso político. Recomendamos no caer absolutamente dominados ni menos ilusionados por lo que significa solo el crecimiento macro-económico, sino avanzar más allá – hacia sus propias profundidades – el escenario del trabajo, los salarios y las condiciones de vida de la población, la vigencia de sus derechos sociales – educación, salud, servicios de agua, luz, desague – vivienda, comunicaciones, deporte, cultura, etc..


Este es un primer nivel para analizar e interpretar la democracia. Un segundo escenario, lo constituyen y representan el ámbito de los Derechos Humanos, una de las columnas vertebrales hoy de la democracia en el siglo XXI, elemento central, empoderado en la coyuntura de los tiempos de la modernidad, dada su profunda y extensa violación en el mundo, muchas veces justificado en nombre de la Democracia, como fue últimamente en Libia, Egipto, Túnez y otros países y también en América del Sur, justo en Chile, Argentina y Brasil.


Pero sí avanzamos y seguimos nuestro camino nos encontramos en el ámbito de la Informalidad y como millones de pobladores de América latina que en los 70 y 80’ eran profundamente cuestionados, otros perseguidos – había en algunos de por medio el contrabando -, a la vuelta de dos décadas esta “ocupación” de sobrevivencia, se ha transformado en “poderosas economías populares” en muchos países – como Perú, Bolivia y Uruguay – en la fortaleza principal, central no solamente de ocupación de más del 70% de mano de obra de la PEA Nacional, además a través de las Micro-finanzas han construido toda una nueva y positiva alternativa de “empresa moderna”: Las MYPES y las PYMES, que en el contexto del sistema político, hoy representan una de las fortalezas centrales la construcción de una Democracia Moderna, basada principalmente en la participación ciudadana – ciudadanía múltiple, por el proceso de migración interna y composición social de las pequeñas y micro empresas -.


Nuestra mirada diferente y de mayor compromiso con la Democracia Moderna, democracia directa, participativa, solidaria, dialogante, nos conduce inexorablemente hacia nuevos territorios- eje multidimensional, básicamente cultural – donde existen hoy y emergen con la fuerza volcánica de los pueblos originarios y de la comunidades históricas, - por siglos olvidadas, excluidas y marginadas por un Estado centralista – encontramos nuevos contextos sociales, culturales, étnicos, donde la Gobernanza de los territorios es colectiva y ancestral, donde se forja y construye una Gobernabilidad basada en sus costumbres, tradiciones, cultura, identidad, formas de comunicación, etc.


Esta nueva Sociedad Civil, emergente es el nuevo poder local, que nos trae consigo nuevas formas de ciudadanía cultural, étnica, ciudadanía múltiple que hoy expresa y manifiesta nuevas formas de democracia dialogante – comunicación intercultural – nuevas formas de reconocimiento de formas intensas, diarias, ancestrales de trabajo, de comunicación directa con la Madre Tierra, con la Madre Naturaleza, esta es la Democracia del Trabajo, de Democracia de la Madre Naturaleza hoy presente a partir del reconocimiento – no rechazo, menos cuestionamiento, negación, menos condena, ilegalidad o criminalización – que la Democracia Legal, formal, moderna, establezca en relación a la Democracia que hoy traen consigo en el conjunto de sus luchas, movilizaciones y nuevas formas de hacer política los Conflictos Sociales y el Nuevo Capital Político y Democrático que hoy emerge en todo el Mundo. Este contexto representa, el amplio escenario de los Nuevos Movimientos Sociales y (in)surgen nuevas formas de Democracia Directa, Participativa, Dialogante, democracia del trabajo.


Si un fantasma recorre el mundo, el fantasma que tiene cuerpo, voz, energía, capacidad de organización, movilización, asume nuevas performances ante la crisis, la adversidad, la dominación el saqueo, el despojo, la explotación, la negación de todos los derechos sociales y laborales, pisotean y derraman sangre inocente en las plazas públicas de todo el mundo, mientras los ricos, los millonarios, llenos de su codicia, miseria moral en plena crisis se vuelvan más ricos con el apoyo del Estado y con dinero de todos los ciudadanos – con su dinero, hoy son desempleados, les embargan sus propiedades y encima cuando protestan los encarcelan -.


El mundo de las clases sociales antagónicas y contradictorias, el mundo de la lucha de clases entre los poderes fácticos de la Gran Burguesía Transnacional, sus Gobiernos, su Estado represivo y el mundo de los emergentes, de los luchadores, de los indignados del mundo, que en el epicentro de la crisis mundial, hoy forjan y construyen un camino diferente, recuperan el mundo que les fue arrebatado por el neoliberalismo, dominando durante tres décadas por la Unipolaridad del Estado Corporativo Global, entrado en desgracia en tiempos de las Tres Crisis Mundiales –(in)surge hoy el Multilateralismo Mundial y los nuevos Poderes Políticos Regionales Descentralizados.


Visualizar en este escenario múltiple, complejo, polarizado, la Democracia Moderna, solamente en la ciudad y en la modernidad es muy arriesgado, incompleto y lleno de puntos positivos al neoliberalismo. Trabajar más allá en los inmensos terrenos donde llegó la mano destructiva del imperialismo – versión las empresas multinacionales, las corporaciones y mega corporaciones transnacionales, vía la inversión masificada y con la autorización y venía de las políticas de la “democracia blanda” de algunos gobierno de turno, es ir real y objetivamente al corazón donde debemos encontrar la Democracia que nace, desarrolla y se consolida junto al trabajo diario de los pueblos migrantes en las ciudades, de los pobres de la cuidad y el campo, de los desempleados, de los millones de jóvenes que han sido absolutamente marginados por el Estado, ineficiente, centralista y fosilizado en sus instituciones principales, de las poblaciones de las comunidades históricas y pueblos originarios.


Con seguridad, encontraremos que la antigua Atenas, que el Ágora griega, - a pesar del transcurrir de los siglos, no ha muerto – está presente y en pleno desarrollo como Nueva Sociedad Civil Emergente, Nuevos Poderes Locales y Nuevas Ciudadanías Múltiples base y centro de la construcción de una Auténtica Democracia Directa, Participativa, Dialogante y Solidaria para la recuperación total de Nuestra América y la construcción de un Mundo diferente, superior, de justicia, igualdad, dignidad, libertad, el mundo que soñaron hace cuatro siglos los grandes intelectuales de La Ilustración.


Arequipa patrimonio cultural de la Humanidad.


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AQP sábado 8 de octubre del 2011.

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