Pedro Sánchez, joven político español
representa la generación política de lo “´ultimo que aún queda del viejo socialismo español,
que por décadas enarboló el Socialismo
Español, desgraciadamente el Señor
Felipe González, líder histórico del Socialismo, hoy todos conocemos que
representa una corriente política
neoliberal dentro del socialismo, la misma que acabó, liquidó a las viejas políticas de la socialdemocracia europea. En
los últimos tiempos, precisamente González
ha tenido manifestaciones contrarias, violentas
contra el proceso de la Revolución Bolivariana en Venezuela –escenario político,
infestado por la derecha política
española, en espacial con el actual gobierno del señor Rajoy y representantes del más puro neoliberalismo. Simplemente
miremos hoy como el señor González,
quiere desea, con su respetable
jerarquía política, una alianza con la vieja
política derechista del “bipartidismo” que gobernó por décadas España y se
acepte o no con el fracaso de las dos elecciones anteriores de NO formar Gobierno, hoy están dando la
estocada política final al Socialismo – desaparecerlo del escenario -. Al conducirlo a la fuerza de la imposición
política a esta alianza con el los políticos del señor Rajoy y formar un gobierno
derechista, que es precisamente el que ha fracasado en las últimos tiempos. Sánchez con muchos errores políticos,
por lo menos defiende lo que poco que aún queda del “viejo socialismo español”, que
resiste a morir políticamente, pero que la coyuntura política de imposición aún
del “viejo bipartidismo”, intenta
salvarse y seguir destruyendo el Estado de bienestar español y seguir llevando
hacia la mayor desocupación y liquidación de derechos sociales del pueblo español.
El tiempo político
será el mejor Juez que al final nos entregará sus resultados.
/////
Pedro Sánchez enfrenta una rebelión
dentro del PSOE por su negativa a favorecer un gobierno del PP.
***
GRAVE CRISIS EN EL SOCIALISMO ESPAÑOL.
Renunció media Comisión Ejecutiva del PSOE
por diferencias con Sánchez.
*****
Felipe González, ex
presidente y uno de los líderes históricos del PSOE, dijo sentirse “engañado”
por Sánchez y esto profundizó la crisis del partido, inmerso en una disputa
sobre si intentar formar gobierno o pasar a la oposición.
Página /12 jueves 29 de setiembre del
2016.
El líder del Partido
Socialista (PSOE), Pedro Sánchez, resiste aferrado a su cargo tras sufrir ayer
un golpe interno gestado por sus críticos, quienes pretendían desbancarlo para
evitar su plan de celebrar primarias, en busca del aval de los militantes socialistas
a su estrategia de formar un gobierno alternativo a los conservadores en
España.
“El líder del PSOE sigue
siendo el que han elegido los militantes del PSOE: Pedro Sánchez”, afirmó,
contundente, el secretario de Organización socialista, César Luena, luego de la
dimisión en bloque de la mitad más uno (17) de los miembros de la Comisión Ejecutiva
Federal socialista.
Con la renuncia masiva –que
se precipito al recrudecer la lucha fratricida en el PSOE luego de un choque
entre el ex presidente Felipe González y Sánchez– los adversarios del actual
líder socialista pretendían que se disolviera el órgano gestor del partido,
incluido el cargo de secretario general, y que una gestora tomara el control.
Sin embargo, Luena explicó
no se disuelve este órgano de dirección sino que se reunirán a la brevedad, sin
los miembros que dimitieron, para convocar un Comité Federal que, como
establecen los Estatutos del PSOE, deberá convocar un Congreso Extraordinario.
“En definitiva, llegamos a
la convocatoria de un Congreso Federal, para que voten los militantes, como
viene defendiendo la Direción Ejecutiva”, remarcó el “numero dos” de Sánchez.
“No caben atajos, ni
artimañas, ni golpes”, aseguró Luena, mientras el secretario de Territorio, el
andaluz Antonio Pradas, uno de los que dimitieron, remarcó que la Ejecutiva “ya
está disuelta”. “Ningún compañero tiene legitimidad para tomar decisiones”,
sostuvo este político afín a la presidenta regional Susana Díaz, principal
rival de Sánchez.
La jornada comenzó convulsa
para los socialistas a raíz de unas declaraciones de Felipe González, quien
dijo que se sentía “engañado” por Sánchez y que éste debía dimitir,
profundizando la crisis en la histórica fuerza española en medio de una
creciente disputa sobre si intentar formar gobierno o pasar a la oposición.
“Felipe González está en el
bando de la abstención, yo estoy en el ‘no’ y en crear un gobierno alternativo.
Me gustaría saber en qué bando está Susana Díaz”, respondió desafiante Sánchez,
implicando en la disputa a la presidenta de Andalucía.
Sánchez provocó gran
división en el PSOE al anunciar planes para intentar formar un gobierno
alternativo al del actual presidente en funciones, el conservador Mariano
Rajoy, cuyo Partido Popular (PP) ganó dos elecciones este año pero no pudo
formar gobierno por carecer de una mayoría suficiente en el Parlamento.
Cuestionado internamente en
su liderazgo después de la debacle de los socialistas en las elecciones
regionales de Galicia y Andalucía, donde fueron superados por Podemos, Sánchez
propuso celebrar primarias el 23 de octubre y un Congreso para definir las
líneas a seguir, ante la presión de los que abogaban por la abstención ante
Rajoy.
Al sumar ayer su voz al
debate, González, una respetada figura dentro del PSOE, partido que lideró
durante más de veinte años, aseguró que Sánchez debía renunciar si el comité
federal partidario rechazaba el sábado su plan de formar un gobierno
alternativo a los conservadores.
“Sánchez me dijo que se
abstendría en segunda votación (...) me siento frustrado, como si me hubieran
engañado”, afirmó González en entrevista con la radio Cadena Ser desde Chile.
El ex mandatario explicó
que se reunió con el actual líder socialista después de las elecciones del 26
de junio y que éste le comunicó que pasaría a la oposición y no intentaría
ningún gobierno alternativo, que votaría contra la investidura el PP en primera
votación pero que en la segunda se abstendría para no impedir la formación de
gobierno.
Esa posición, que González
defiende públicamente desde hace tiempo, hubiese puesto fin a un inédito
bloqueo político que ya dura nueve meses, por la incapacidad de los principales
partidos para llegar a un acuerdo de gobierno tras dos elecciones generales en
las que el conservador PP venció pero sin mayoría suficiente para gobernar.
La reacción de la cúpula
del PSOE a las palabras del ex presidente socialista, quien gobernó entre 1982
y 1994, no se hizo esperar. Primero en un comunicado y poco después Sánchez
brindó una entrevista al periódico digital “eldiario.es” en la que fue
determinante: “Las decisiones las toma esta Ejecutiva y yo en primera persona”,
dijo.
El líder del PSOE se
refirió a los dos bandos que existen en el PSOE y defendió su apuesta de
recurrir a la militancia. Pero los rivales de Sánchez, encabezados por Susana
Díaz, querían evitar la convocatoria a todo costa.
Los rumores de que querían
forzar su salida con un dimisión en masa de la mitad de la Ejecutiva eran tan
fuertes que el propio Sanchez salió a enfrentarlos: “Si no se sienten parte de
este proyecto, yo en su lugar dimitiría hoy”, sostuvo. Y así lo hicieron.
A pesar de ello, el
objetivo de Sánchez, que era celebrar un Congreso Federal, que previamente
requiere celebrar primarias, sigue adelante. Sus críticos aún pueden lograr
frenarlo convenciendo a la mayoría de los 290 integrantes del Comité Federal
socialista. Y si todo esto no funciona, Díaz ya sugirió que si sus compañeros
se lo piden dará un paso al frente y disputará a Sánchez el liderazgo del PSOE.
“Políticamente es muy grave
lo que ocurrió”, porque “algunos o algunas” han querido torcer la voluntad de
los órganos legítimos respaldados por los militantes, denunció Luena, fiel a
Sánchez.
“Se acaba el teatro y se
consuma un golpe de régimen”, denunció la vocera de Podemos en el parlamento,
Irene Montero, quien cree que el intento de voltear a Sánchez acerca a España a
un gobierno del PP, ya que Rajoy sólo contempla ser investido con la abstención
del PSOE. Pablo Iglesias además ya da por perdida la posibilidad de que se
forme un gobierno alternativo a los conservadores, liderado por el socialista
Sánchez.
La
política española está pendiente de lo que ocurra en el seno del PSOE, ya que
de ello depende que haya un nuevo gobierno antes del 31 de octubre y se eviten unas terceras elecciones
generales consecutivas en un año.
*****
No hay comentarios:
Publicar un comentario