&&&&&
LAS OPINIONES SOBRE EL DISCURSLO DE MILEI EN DAVOS. "ANACRÓNICO", "PAPELÓN" Y "DE OTRA GALAXIA": LAS REACCIONES AL DISCURSO DE MILEI EN DAVOS. AMPLIO RECHAZO DE POLÍTICOS Y ACADÉMICOS “Milei no entiende al mundo, y según él el feminismo y el cambio climático son agenda del socialismo, y lo dice en un foro donde han dedicado mucho espacio a estos temas. Habló de un mundo apocalíptico, en peligro ante el socialismo, feminismo, el ambientalismo, con nazis y populistas ¡Guau, que discurso! Si yo fuera un empresario ante este discurso, pondría mi dinero en otro país”. “¿Alguno de nosotros puede decir que paga los impuestos de manera voluntaria?” preguntó en un segmento de su desconcertante discurso en el Foro Económico de Davos, el presidente argentino Javier Milei. Los asistentes —la mitad de la sala en verdad, el vacío se imponía en el auditorio—, representantes de las potencias mundiales lo miraban atónitos. Y respondieron de igual modo: “Desconcertados y con tímidos aplausos”, aseguran los medios acreditados sobre el auditorio que lo escuchó con “estupor y sorpresa”. En Argentina en tanto, los calificativos para esta “lisérgica” intervención —según una definición jocosa, si no fuera acertada—, fueron desde “vergonzoso” a “papelón” pasando por “anacrónico”, “de otra galaxia” o simplemente “una antigüedad”.
LA PLAZA PÚBLICA DE LAS REDES
SOCIALES
De
entrada, entre las repercusiones en la plaza pública que
hoy son las redes sociales, el exministro y
excanciller Jorge Taiana sentenció: “El discurso del Presidente Milei en el Foro de Davos resultó vergonzoso. Fue misógino,
contrario a la Justicia
Social, negando el cambio climático y
cuestionando el rol del Estado como regulador de
los diversos intereses sectoriales. Y de Malvinas…nada”,
lamentó.
También
fue crítico Pablo Avelluto, el exMinistro de
Cultura del macrismo.
“Escuché el discurso
del presidente en Davos. Un mensaje reaccionario basado en falacias y actos de fe propios de la década del 30. Debo ser colectivista, socialista, comunista, zurdo de mierda o
lo que les parezca. Pero el liberalismo
está muy lejos de su delirio
fanático”. A las respuestas odiadoras, Avelluto
contestó: “¿Puedo decir que la rueda de este señor es
cuadrada? ¿O eso significa ponerle palos? Voy a oponerme, nomás. Como
corresponde en democracia a los que no somos
oficialistas”.
Para Margarita
Stolbizer, integrante
de Hacemos Coalición Federal, la bancada que
lidera Miguel Pichetto, el discurso,
"cargado de soberbia
irracional, que no distingue la barricada de campaña con la reunión de los líderes del mundo, que no entiende la democracia y el progreso social, nos avergüenza como país.
Lamentable”, sintetizó.
El diputado radical Martín Tetaz se mostró decepcionado y tuiteó: "El presidente llevó a Davos la misma presentación que viene haciendo hace años (incluso hay una charla TED que es una réplica exacta). Insiste con el muñeco de paja del socialismo y perdió una oportunidad única para presentar los negocios que Argentina puede ofrecer al mundo". "Milei se toma el trabajito de ir a Davos a defender el patriarcado. Sin miedo al ridículo, sigue con discursos para la tribuna machirula reaccionaria. Las mujeres le tenemos que responder este #24E masivamente en la calle", sostuvo la diputada de la izquierda Myriam Bregman, referenciando al paro general convocado por la CGT.
LA PALABRA, LA POSE, EL
PAPELÓN
“Fue un desastre ese discurso, una antigüedad, y anacrónico” sostuvo la investigadora Alicia Entel. “No sé si se enteró que cayó la Unión Soviética y ya cayó el muro, ni
si conoce lo que llevan adelante los movimientos de
mujeres. El tema es entre irónico, preocupante y peligroso porque en Milei el personaje le
gana a la persona. Y no sé si esta dualidad no es de una cierta perversión”, evalúa. Estas
palabras del Presidente
frente a los organismos internacionales “que se estarían dejando llevar por el socialismo”, sostiene la investigadora, devela que
necesita un asesoramiento. “Lo que dijo no existe en la realidad. Habría que
recomendarle el uso de algún criterio de realidad”, puntualizó.
El oficialismo
mileísta, en tanto, escuchó embelesado el
“discurso de campaña” sin distinguir la confusión generada por el
falso encuadre sobre el
interlocutor al que se dirigía Milei, en el Foro más economicista. Incongruencias que
permitieron a usuarios como Juan
Manuel, trabajador del mundo editorial, advertir: “¿Estamos en el
momento de mayor prosperidad, pero el mundo está conducido por el socialismo empobrecedor? Qué bolonqui tiene en la cabeza este pibe”."Milei balbuceó ante
este auditorio. Repitió frases remanidas y solo fue
enérgico al concluir con su latiguillo del “¡…carajo!”. Pero “el discurso político y de la
diplomacia es un arte, y esto no se refleja en Milei”, explicó a Página/12 Joe Goldman, periodista de ABC News de EEUU
en Sudamérica.
“Milei no entiende al mundo —sostuvo Goldman—, y según él el feminismo y el cambio
climático son agenda del socialismo, y lo
dice en un foro donde han dedicado mucho espacio a estos temas. Habló de un mundo apocalíptico, en peligro ante el socialismo, feminismo, el
ambientalismo, con nazis
y populistas ¡Guau,
que discurso! Si yo fuera un empresario ante
este discurso, pondría mi dinero en otro país”
advierte Goldman, balanceando su análisis entre
la ironía y la comicidad.
La presidenta del partido Verde en Argentina, Silvia Vázquez y, exdiputada
por el radicalismo se detuvo a explicar que “la
propuesta de Milei en Davos no es sostenible”. Descalifica “la historia
institucional de nuestro país y nuestras leyes medioambientales. ¡Milei es un retroceso!”
enfatizó.
Para
repensar esta ponencia de Milei
en Davos, sirve la sencillez de Leandro Rossi,
el medallista de plata en el Mundial de Oratoria en España, en 2023, quien primero define el ámbito: “Davos no es la cómic-con a la que Milei asistía
disfrazado para hablarle a sus alumnitos tuiteros sobre
la escuela austriaca”.
Y concluye: “Davos es (o más bien, era) la
oportunidad para que Argentina obtenga divisas para no volar por los
aires. Pero él no milita las ideas reales de la
libertad a gran escala, sin embargo, es el presidente
de la tercera economía regional de América
Latina, la cara visible de cada argentino, por lo que lo que hizo hoy, fue simplemente ridiculizar a 47
millones, ante el mundo entero”.
/////
UN FANTASMA RECORRE EUROPA.
DESCONCIERTO TOTAL EN EL FORO DE DAVOS ANTE EL INSÓLITO DISCURSO DE JAVIER MILEI.
"Están cooptados
por una visión que conduce al socialismo", les dijo a los líderes del
mundo.
*****
Milei sostuvo en Davos,
ante un Auditorio estupefacto, que Occidente
está en riesgo porque las ideas socialistas y
colectivistas, dominan todos los gobiernos y
organismos Internacionales- Para el presidente, los “neomarxistas” controlan el mundo con la idea de las regulaciones
estatales, la justicia social, el feminismo y el cambio
climático. Un discurso
insólito hasta la para la gran mayoría de los empresarios. En su primera
exposición internacional, el mandatario
cuestionó a la dirigencia política global, por
seguir ideas colectivistas.
Críticas al “feminismo
radical” y al ambientalismo. Desconcierto
total en el Foro de Davos, ante el insólito
discurso de Milei.
El Jefe de Estado argentino, brindó un discurso
de 20 minutos, ante el Foro Económico Mundial FEM en Davos.
***
Por
Sebastián Cazón
Fuente
Página /12 jueves 18 de enero del 2023.
El clima húmedo de montaña que se respira en Davos recibió por estos días a los líderes políticos y empresarios más poderosos del planeta. Como todos los eneros, aviones
privados y comerciales aterrizaron en la ciudad de los Alpes
suizos para trasladar a los participantes del Foro
Económico Mundial. Ante ellos, Javier Milei hizo su debut internacional. El presidente argentino se
paró frente al estrado, se acomodó los anteojos para leer su discurso y sin
medias tintas acusó a la élite política de estar
"cooptada por una
visión que conduce al socialismo y la pobreza".
"Estoy acá para
decirles que Occidente
está en peligro", los retó. Desde la
platea, representantes de organismos multilaterales
escuchaban atónitos. "No se dejen amedrentar por
la casta", aleccionó a los empresarios presentes, a quienes
calificó de "héroes". Sus palabras
generaron algunas risas, tenues aplausos y mucho silencio.
Previo a su exposición, el mandatario se reunió con el canciller
británico David Cameron y hablaron de un tema que no lo interpela: la causa Malvinas. Por la tarde, mantuvo encuentros con
la reina de los Países Bajos, Máxima Zorreguieta; y la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva.
Los
más de 20 minutos
de intervención del jefe
de Estado estuvieron plagados de duros cuestionamientos al Estado y nostálgicos
elogios a la economía
mundial del siglo
XIX. Con el manual de la escuela austríaca bajo el brazo, Milei sostuvo que
“el capitalismo de libre empresa es la única herramienta
que tenemos para terminar con el hambre, la pobreza y la indigencia
a lo largo y a lo ancho de todo el planeta”. En contraposición,
y como el peor mal de todos los males, remarcó que la "justicia
social" es "injusta" y "violenta" porque "el Estado se financia a través de impuestos y los
impuestos se cobran de manera coactiva".
“Buena parte de las ideas aceptadas en Occidente son
variantes colectivistas,
ya sea que se declamen comunistas, fascistas, nazis,
socialistas, socialdemócratas, keynesianos, progresistas, populistas,
nacionalistas o globalistas. En el fondo no hay diferencias sustantivas,
todos sostienen que el Estado
debe dirigir la vida de los individuos”,
argumentó ante la sorpresa de los asistentes, en un auditorio con la mitad de las butacas vacías.
Con esa particular visión, el Presidente ratificó lo que había expresado en la
antesala de su llegada a Suiza, cuando aseguró
que la cumbre que opera como altar de los mega negocios globales era un evento “contaminado por la agenda
socialista”.
La calificación sorprendió
a los propios asistentes, que forman parte del establishment
internacional, pero que no acompañan la extrema defensa del mercado ni los exagerados
cuestionamientos a la dirigencia
política. También se ubicó en las antípodas del compromiso que el papa Francisco le requirió a los asistentes del Foro:
"Es esencial que los Estados y las empresas se unan para promover una
solución ética con visión de futuro... dando prioridad a los pobres, los necesitados y aquellos en situaciones más vulnerables".
La misma línea siguió el mandatario de España, Pedro Sánchez, que habló justamente después de
Milei. Parado en el
atril, pareció contestarle al argentino.
“Los españoles
saben que las políticas neoliberales no funcionan. Que la opción de reducir el tamaño del
sector público y dejar solos a los ciudadanos y
a las pequeñas empresas cuando surgen los problemas no tiene sentido. Y que,
cuando colaboramos y estamos juntos, somos más fuertes”,
sentenció.
Nostalgia del siglo XIX
El
libreto que Milei llevó a
Davos es el mismo que difundió los últimos años como panelista de televisión, el calco de
una charla TED que
dio en 2019 y la carta de seducción que utilizó
durante la campaña electoral.
Repitiendo los mismos conceptos, puso como ejemplo a la Argentina, al asegurar que su mejor época fue “cuando adoptó el modelo libertario en 1860 y se convirtió en la primera potencia mundial”, hasta que ingresaron “las ideas del colectivismo y comenzó a empobrecerse”. En suma, para el anarcocapitalista, los míticos años de gloria --cuando el país supuestamente tenía el PBI per cápita más alto del mundo-- se extendieron hasta la llegada de Hipólito Yrigoyen a la Casa Rosada, una decadencia que se profundizó con el surgimiento del peronismo. La falta de estadísticas oficiales y la profunda concentración de la riqueza de aquel momento, sin embargo, ponen en jaque al emporio aludido.
Bajo ese relato, Milei continuó su exposición con el
contrapunto de dos modelos:
capitalismo de libre
mercado versus socialismo. En esta última
categoría, a la que denomina "colectivismo", ubicó
a los líderes de Occidente y a organismos multilaterales.
"En las últimas décadas, motivados por algunos deseos de
querer ayudar al prójimo y otros por el deseo de pertenecer a una casta privilegiada, han
abandonado el modelo de la libertad por
distintas versiones de lo que llamamos colectivismo",
esgrimió.
Antiderechos
En
esa misma bolsa, de
actores que dañaron al capitalismo en el último tiempo, incorporó al “feminismo radical”. Lo
señaló como el culpable
de
“una pelea
ridícula y antinatural entre
el hombre y la mujer”. "En lo único que
devino esta agenda del feminismo radical es en
mayor intervención del Estado para entorpecer el
proceso económico, darles trabajo a burócratas que no le aportan nada a la sociedad, sea
en formato de ministerios de la mujer u
organismos internacionales dedicados a promover
esta agenda", lanzó con furia.
También
desenfundó su postura antiambientalista, al
indicar que el socialismo
“sostiene que los seres humanos dañamos el planeta y que debe ser
protegido a toda costa”. Y de paso habló de políticas de “control poblacional” que
incluyen “la agenda sangrienta del aborto”.
Los empresarios, héroes
Para
concluir su alocución,
Milei intentó brindar un cierre cargado de épica. A pesar de contar con
tan solo un mes de experiencia presidencial, le
dejó una lección de vida a los jefes de Estado de
todo el mundo. “No se dejen amedrentar por la casta
política ni por los parásitos que viven del Estado”, les pidió. Con el
mismo tono altivo, les habló a los
representantes de las multinacionales
más ricas del planeta:
“No se entreguen a una clase política que quiere perpetuarse en el poder y mantener sus privilegios. Ustedes son benefactores sociales, ustedes son héroes”. Tras presentarse como un aliado internacional, les exigió a los multimillonarios que “no cedan al avance del Estado" porque "el Estado no es la solución sino el problema". "Ustedes son los protagonistas”, los alentó y cerró con su inefable “viva la libertad, carajo”.
El discurso desconcertó a la tribuna.
Los acompasados aplausos del final se mezclaron con risas, miradas cómplices, ceños fruncidos y, sobre todo, un resonante silencio. La
expectativa que el libertario
había generado en la previa a la cumbre se evaporó en
tan solo unos minutos. "Puede sonar ridículo lo
que estoy diciendo...", se atajó Milei en un pasaje de su intervención. Ese fue uno de los pocos momentos en donde casi todos
coincidieron con el Presidente.
*****
No hay comentarios:
Publicar un comentario