Reapareció el Señor Collor de Melo el ex presidente de Brasil,
suspendido y vacado por el Congreso, del cargo de Presidente por CORRUPCIÓN, tráfico
de influencias,
sistema de loby gubernamental a cambio de sobornos – 1990 Presidente diciembre
de 1992 a “su casa” - han pasado más de
dos décadas y ahora como Senador, “sospechoso” de haber recibido propinas por
más de 20 millones de reales (poco menos de 7 millones de dólares), Pero
que linda y millonaria propina, así con mucho gusto y placer ingresamos a la
política si esa cantidad es propina,
cuanto serán los “lobbies” increíble,
pero cierto. Pensamos que ya había terminado la política para él, sin embargo,
igual que otros corruptos y ladrones de América latina que llegaron al más alto
cargo político Presidente de la
República, retornaron con mayores impulsos y prácticas más refinadas para
continuar robando. En aquellos tiempos por diferentes motivos políticos pero
metidos en el inmenso “mundo subterráneo” de la corrupción, fueron expulsados gobernantes en Ecuador, Brasil,
Argentina, Perú, Bolivia, Uruguay, Paraguay, Venezuela, Colombia, Panamá, etc.
Y quién lo sacó del cargo presidencial, la justicia, NO, los
militares NO, la prensa NO – si
los denunció – en realidad, fuimos quienes formamos parte de los Movimientos Sociales anti corrupción,
movimientos sociales anti-dictadura, logramos movilizar miles de miles, los
más amplios sectores populares en todo América
Latina – pesó, significó mucho la independencia de los Líderes y del propio movimiento social -, para sacar, expulsar del
gobierno a los corruptos, violadores de los DD.HH. y traidores, que ya habían
“engordado” su billetera y sus depósitos ilegales, criminales en los Paraísos Fiscales de Centro América y
el Caribe. Al final, muchos de ellos se fueron de la política “para
siempre”, otros fuera de la política por
un buen tiempo, pero al final reaparecieron, pero, otros regresaron, retornaron
con el apoyo de sus partidos, pero en un “mundo” totalmente contaminado por la
corrupción y la traición. Y nuevamente,
los que llegaron a la Presidencia, otra vez, ahora sí en forma contundente
– se cuenta con mayores canales de información, investigación y comunicación –
son acusados de corrupción y cometer actos realmente criminales, pero muchas veces
las instituciones encargadas de procesar a los corruptos, también han sido copadas por la corrupción.
Fernando Collor
de Melo – el presidente más joven de Brasil – 15 de marzo de 1990 al 29 de
diciembre de 1992 –“renunció” fue expulsado, pero se fue, cuando se vio
derrotado por las investigaciones del Congreso, acusado de corrupción política,
tráfico de influencias, sistema de loby gubernamental a cambio de sobornos.
Llegó a la Presidencia junto con las políticas del Consenso de Washington, como
todo el neoliberalismo – contra la corrupción – pero al final fue atrapado por
la corrupción política.
***
Miremos ahora con mucha atención es el Tribunal Supremo Federal, en Brasil – se puso las pilas, recuperó su
autonomía, realmente está trabajando en un escenario nacional donde el Estado de Derecho,
ahora sí, permite que no hay “vacas sagradas”, no hay intocables y poderosos a
los cuales no se les podía tocar ni con una flor, pero se fueron adentro a la cárcel “grandes empresarios” de la
Construcción – verdaderos imperialistas que globalizaron sus empresas –
políticos de todos los partidos, incluyendo distinguidos políticos del Partido gobernante – como su ex
tesorero – Pero ahora la “olla inmunda de la corrupción” se destapa en forma definitiva y este ejemplo que hoy
funciona en democracia en Brasil para nosotros está limpiando la política, para
recuperar la política, enviando a la cárcel a los corruptos y ladrones, práctica
que debería ser una política institucional que abra escenarios a nivel
continental – que el Estado de Derecho funcione en su máximo contenido -, porque hoy es urgente y necesario “salvar”
a la POLITICA del poder de los buitres y dinosaurios.
“Personajes” que vienen o proceden de distintos “sitios” y contextos
de la sociedad – como
empresarios, comerciantes, falsos periodistas educadores, militares y policías
en retiro (los lobbies) mineros formales e informales, arribistas, oportunistas,
etc, pero también y vemos con suma preocupación como la minería criminal, el
narcotráfico han logrado ampliar este escenario
complejo y logran penetrar en la Política por distintos medios, prácticas y
caminos y al final han capturado la política. Cuidado que la corrupción “tiene distintas caras, formas y
estilos” entre visibles e invisibles. La justicia hoy es un camino muy fuerte y
amplio – hay que fortalecerlo – en la lucha nacional contra la corrupción, pero
el otro camino debe ser el de los Movimientos Sociales – desde la Sociedad Civil – el Poder Local Popular
hoy en América Latina es muy poderoso, emergente, plural, autónomo y
democrático y debemos consolidar este gran trabajo para salvar a la POLITICA del asalto,
captura y secuestro que la corrupción a envuelto las instituciones de la
Política.
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Collor de Melo acusó al
procurador general de la República de violar la Constitución. Ahora el 2015, como Senador - volvió a la política -. y la acusación es
ahora del Tribunal Federal.
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BRASIL: ALLANAN LAS CASAS DE COLLOR DE MELO.
La Justicia de Brasil ordenó que se registren
las viviendas de tres Senadores, entre ellos Collor.
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El ex mandatario de Brasil es
sospechoso de haber recibido 20 millones de reales (poco menos de siete
millones de dólares) en propinas, para facilitar contratos entre una
constructora y la estatal Petrobras.
Eric Nepomuceno
Página/12 En Brasil
Desde
Río de Janeiro miércoles 15 de julio del 2015.
Las
residencias de tres senadores de la República, así como sus despachos dentro
del mismísimo Senado y sus oficinas y empresas privadas fueron allanados ayer,
cumpliendo la determinación del Supremo Tribunal Federal. En total, fueron
expedidas 53 órdenes de allanamiento, que además alcanzaron a algunos diputados
y a varios empresarios.
Hasta
ahora las acciones de la Policía Federal, del Ministerio Público y del juez de
primera instancia Sergio Moro estaban concentradas en ex funcionarios de la
estatal Petrobras y en los responsables (algunos, directamente propietarios) de
las más grandes e importantes constructoras del país. Algunas, como la Camargo
Correa, la Andrade Gutiérrez y especialmente la Oderbrecht están entre las
mayores de América Latina, y todos sus directivos están detenidos.
Pues
a partir de ayer, la ola alcanzó a la clase política. Y ya no por decisión de
un juez provinciano: para las operaciones de allanamiento se solicitó una
autorización de la Corte Suprema, una vez que ocupantes de puestos de primera
línea en el Poder Ejecutivo e integrantes del Poder Legislativo cuentan con
fuero especial.
Ninguno
de los investigados que fueron blanco de las acciones de ayer pertenece al PT y
a su principal aliado, el PMDB. En las residencias del actual senador y ex
presidente Fernando Collor de Melo (sí, porque él dispone de varias) fueron
aprehendidos desde relojes a autos de gran lujo. En Brasilia, la Policía
Federal retuvo un Lamborghini color plata, una Ferrari roja y un Porsche negro.
Sumado, el valor de mercado de los autos supera la marca del millón de dólares.
Collor de Melo es sospechoso, acorde a denuncias de un empresario que aceptó el
pacto de “delación premiada” ofrecido por la Justicia, de haber recibido 20
millones de reales (poco menos de siete millones de dólares) en propinas, para
facilitar contratos entre la constructora y la Petrobras.
Collor
tiene un antecedente grave: ha sido el único presidente, en la historia de la
República, a tener su mandato suspendido por el Congreso, a raíz precisamente
de corrupción. Pasado el período en que sus derechos políticos estaban vedados,
volvió a la vida pública, fue electo senador y se alió a su antiguo enemigo más
atroz, Lula da Silva. Y, ahora, de Dilma Rou- sseff: en la política brasileña,
la noción de principios morales no suele mostrar consistencia alguna a la hora
de las alianzas.
Otro
senador que tuvo su residencia allanada es Ciro Nogueira, que preside el PP
(Partido Progresista), igualmente aliado del gobierno. El tercero es Fernando
Bezerra, del ahora opositor PSB (Partido Socialista Brasileño), que hasta
principios del año pasado integraba la alianza del gobierno. El mismo Bezerra
fue ministro de Dilma.
Acorde
a la decisión de la Corte Suprema, las medidas fueron adoptadas para impedir
que documentos que puedan comprometer a los investigados fuesen destruidos. En
cuanto a bienes aprehendidos, se sospecha que pueden haber sido adquiridos por
dinero ilegal.
La
reacción del Senado ha sido dura. Una nota divulgada al principio de la noche,
firmada por todos los líderes de los partidos, protestó duramente por lo que se
clasificó de “acción ilegal”. El argumento es que las dependencias de la Casa
son inviolables, y que cualquier allanamiento debería ser realizado exclusivamente
por la Policía Legislativa, que tiene jurisdicción exclusiva en el ámbito del
Congreso.
Collor
de Melo reaccionó de manera habitual: fue extremadamente agresivo contra el
procurador-general de la República, a quien acusó de violar la Constitución.
Aseguró que, pese a estar bajo investigación, siquiera fue llamado para prestar
declaraciones a la Justicia.
El
pánico que cundió en el Congreso tiene razón de ser. Es que son muchos los
diputados y senadores mencionados por los empresarios e intermediarios de
propina en las denuncias que tratan de aclarar los mecanismos de corrupción y
desvío de recursos públicos en la Petrobras. Pero según los presos fueron
aceptando los acuerdos de “delación premiada”, en que el acusado revela lo que
sabe a cambio de la disminución o eliminación de la condena, surgieron nombres
de otras estatales, del sector de energía eléctrica, y de políticos de todos
los partidos, la oposición inclusive. Si a partir de ahora les llegó el
momento, será un sálvese quien pueda en el Congreso. Se investigaa a 22
diputados y 13 senadores.
Para
empezar, nada menos que los presidentes de la Cámara de Diputados, Eduardo
Cunha, y del Senado, Renan Calheiros, están entre los investigados. Ambos
tienen un largo y sólido historial de negocios excusos, pero jamás fueron
tocados por la Justicia. Calheiros, por ejemplo, renunció a la misma presidencia
del Senado, en 2007, cuando se denunció que una constructora pagaba los
elevados gastos de un hijo que él tuvo fuera de su matrimonio con una
periodista de la TV Globo, ejemplar típico de las caza-políticos que abundan en
Brasilia.
Flagrado en un acto claramente ilícito –aceptar que una constructora con
contratos con el gobierno pagase sus gastos particulares– Calheiros fue
perdonado por la esposa y protegido por sus pares. Renunció a la presidencia
del Senado, siguió con sus actos y actitudes y finalmente volvió, gracias a la
benevolencia de sus colegas, al puesto máximo que un parlamentario puede alcanzar, que es, al
presidir el Senado, presidir al mismo Congreso.
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